La publicidad programática

El modelo de la publicidad programática en las redes sociales – es decir, el sistema en el que las decisiones de qué anuncios ve cada usuario la toman las máquinas siguiendo complejos algoritmos – garantiza precisión para que los anunciantes aprovechen al máximo sus presupuestos publicitarios. Sin embargo, el contexto político de los últimos meses ha sacado a relucir la otra cara de esa moneda. Para muchos es un tema no político, sino de control.

La “economía de bondad” frente al modelo de publicidad de Facebook: una cuestión de control

• Más de 500 marcas importantes han cancelado su publicidad en Facebook e Instagram, incluidos Unilever, Verizon y Reebok, buscado obligar al gigante social a tomar una posición más activa para moderar el discurso de odio y vistas extremistas que aparecen frecuentemente en sus plataformas.
• Facebook ofrece una precisión casi incomparable en términos de alcanzar una audiencia determinada con anuncios individualizados, pero adolece de una falta de matices al comprender los contextos más amplios lo cual puede ser negativo desde la perspectiva de seguridad del contenido para la marca.
• Todas las principales plataformas de redes sociales, con sus propios modelos de anuncios automatizados, se enfrentan a problemas similares, por lo que algunas marcas han tomado la decisión de reducir temporalmente la inversión publicitaria en ellas.
• Para los anunciantes que participan en el boicot, su participación no es solo una declaración política, sino también una oportunidad para que puedan reafirmar cierto control sobre su publicidad.

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